¡¡¡Feliz ombligo de semana, chamines y chaminas!!! Aquí me tienen, como un clavel, ¡lista, presta y dispuesta! para batirles lo más calientico de la movida farandulera de aquí, allá, y más “acullá”, donde los rollos, brollos, bretes, tramoyas y tretas ¡abundan como el alpiste!...
Miss Grand Venezuela 2025
Así que, sin más preámbulo y entrando de lleno en materia, les cuento que la Miss Portuguesa 2017 (¡¡¡diiigooo!!!), la Miss Grand Venezuela 2025, la NARIMAN BATTIKHA, llegó más sola que liceo en vacaciones al encuentro con la prensa luego de ser coronada como una de las mujeres más bellas de este país; resulta que todos quedaron sorprendidos al ver que en el cacareado desayuno (café y tequeños) la reina estaba como la una, es decir, ningún chivo de la organización la acompañó para apoyarla, yyy todos querían oír las palabras de la Jacqueline Aguilera, a quien aparentemente se le pegaron las sábanas, porque ni por accidente se asomó…
¿Será que le tuvo miedo a enfrentar las críticas por el showcito de quinta que montó?
¡No me extraña, araña!... Tampoco ningún otro encargado de la fulana desorganización dijo presente, pero la reina se supo defender y no cayó en la trampa de las preguntas venenosas de algunos missólogos que estaban presentes en el mentado encuentro...
La Matica (¡a puuueees!) la Battikha espepitó que contó con el apoyo de Osmel Sousa y le envió unas palabras al dueño del circo, dígase: al chinito Nawat, dejando clarito que ese triunfo estaba comprado, ¡diiigooo!, guisado, ¡ay, perdón… es que el corrector no me deja transcribir! El triunfo estaba “muy bien ganado” y por ende ella estaba más feliz que una lombriz...
Además, comentó que lo que más le importa es hacer "billete" en referencia a las cuatro B que tiene como premisa el certamen, que para mí son: básico, burdo, barato y baboso...
Ronda